Áreas industriales en conexión directa con el AVE, el puerto de Leixões y Sa Carneiro. La ofensiva lanzada por el norte de Portugal para contar, en el plazo de cuatro años, con la mayor oferta de suelo industrial proyectada en la zona se diferencia de lo que ha venido ocurriendo hasta ahora en la región fronteriza en un factor clave: la planificación.
Durante las últimas dos décadas, las cámaras municipales asentadas al otro lado del río Miño y los inversores privados se lanzaron a la construcción de pequeños polígonos industriales (de entre 100.000 y 300.000 metros cuadrados), bien conectados con la autopista A3 de enlace con la comunidad gallega, aunque en zonas que, inicialmente, no estaban pensadas para uso industrial con el objetivo de atraer el asentamiento de las empresas que no encontraban terrenos en Galicia.
La nueva promoción de suelo prevista para los próximos cuatro años ha evolucionado hacia una mejor planificación y ordenación de las zonas industriales en función de las principales vías de comunicación por tierra, mar y aire.?
Planificación
El proyecto de creación de la Red Nacional de Plataformas Logísticas de Portugal dispone las once nuevas áreas en conexión directa con el trazado del tren de alta velocidad. Esto, en lo que a la región norte se refiere, pone en una situación de privilegio a la plataformas de la vecina Valença, (algo menos a la de Chaves), que estará ligada mediante un enlace directo al AVE a las otras dos grandes plataformas logísticas proyectadas en la región del norte, Maia (Trofa) y la del puerto de Leixões.
Pero es que, además, la red del AVE Oporto-Vigo, que deberá estar operativa en el 2013, tendrá conexión directa con Sa Carneiro, el aeródromo de referencia en el norte de Portugal con Galicia, mediante una línea que unirá los centros de las ciudades de Vigo y Oporto en media hora (el viaje en tren a día de hoy dura unas tres horas). Un aliciente más para la atracción de nuevas empresas.
In La Voz de Galicia
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