El Miño baja con el mismo duelo y esperanza sin importar la ribera. «Dende Viana do Castelo a Valença e Tui imos sufrir máis, porque vivimos cos galegos e os galegos viven con nós». El alcalde de Valença, Manuel Lopes, mira hacia Tui, igual que su homónimo se refleja en su villa, donde hace poco más de un mes ratificaron su hermanamiento como eurociudad. El regidor tiene claro que la crisis forzará un nuevo escenario y marcará el final de una historia, pero también apunta que «saldremos y con mucha fuerza». Sobre el impacto en la zona, Lopes destaca la dependencia de un vínculo amputado sin previo aviso y que hasta el 13 de marzo tenía una salud de hierro, como el puente que les une con Tui. «Hai tal dependencia cos galegos que, ó non haber libre circulación e mentres non se restitúa, vai ser moito máis difícil recuperar a nosa economía», advierte el alcalde luso. Lopes recuerda que su comercio es el motor económico y que los gallegos son sus primeros consumidores, también de servicios y actividades. «Temos que estar preparados porque o problema continuará durante anos e teremos novas regras e novos sistemas de seguridade, pero estou seguro de que imos saír», señala. Recuerda que el suyo fue el primer municipio del país en desinfectar todo y que solo tienen seis positivos. Cree que el pico del Alto Miño se debe a los «casos importados por la industria».
in La Voz de Galicia
Sem comentários:
Enviar um comentário