Los lusos desoyen a su ministro, que les pidió que no crucen la frontera para no perder los impuestos
El patriotismo no tiene cartera. Los portugueses han hecho oídos sordos al llamamiento de su ministro de Economía, Manuel Caldeira, que les ha pedido que no crucen la frontera para repostar gasolina, apelando a «la responsabilidad ciudadana para no poner en peligro el contexto presupuestario». «Muchos portugueses están pagando impuestos en España y eso es algo que tenemos que pedirles que no hagan», explicó Caldeira el sábado.
Pero sus argumentos no convencen a los súbditos lusos, asfixiados por la escalada de impuestos. Especialmente a los que viven cerca del Miño y que ven la rentabilidad de su economía doméstica mucho más cerca.
«Escuché que en la televisión que el ministro dijo algo de eso, pero me pareció tan insólito que supuse que sería una broma», manifestó ayer Elena Matos. Esta vecina de Viana do Castelo trabaja en Valença. «Claro que vengo a echar gasolina a Tui, ahorro hasta 15 euros por semana con solo cruzar el puente, eso sí que no es ninguna broma», señaló la mujer mientras repostaba.
El impuesto que grava la gasolina y el gasoil con 6 céntimos por litro y que está en vigor desde el 12 de febrero, ha incrementado el desfase de precios que se mantiene desde hace años. En las gasolineras gallegas de frontera aseguran que el flujo de clientes portugueses se mantiene sin grandes cambios. Será durante la operación salida de Semana Santa cuando más se pueda notar la fuga de conductores lusos. Además en Portugal se ha anunciado ya otra subida en los carburantes para principios de mes mientras que en Galicia, como en el resto de España, se afronta un período vacacional con los precios más bajos de los últimos años durante la Semana Santa.
Las cuentas se hacen igual en las dos riberas del Miño. En un depósito de 60 litros de gasolina y con diferencias que casi pueden alcanzar los 30 céntimos por litro, un automovilista puede ahorrar hasta 16 euros, estirando así su dinero en 250 kilómetros más de media.
El desfase es evidente en municipios limítrofes como Tui y Valença y se repite entre Vila Nova de Cerveira y Tomiño. En la gasolinera de Valença el precio del diésel ayer era de 1,13 céntimos por litro mientras que en la más próxima del lado gallego era de 0,945 euros y en el Outletui no superaba los 0,91. Es en el caso de las gasolina sin plomo de 95 octanos donde hay la mayor diferencia. En Tui estaba a 1,15 euros en la Avenida de Portugal y a 1,10 en el centro comercial; frente a los 1,37 euros a los que se vendía en Portugal, donde solo un vehículo de la Guarda Nacional Republicana repostaba a las diez de la mañana.
in La Voz de Galicia
Sem comentários:
Enviar um comentário