domingo, 24 de julho de 2011

La Fortaleza de Valença a la luz de la luna

Una noche, una noche de viernes (22 de julio), las murallas de la Fortaleza de Valença, otrora defensoras de los ataques españoles, fueron tomadas por un grupo de curiosos, *linterna en mano. El grupo estaba formado casi a partes iguales por españoles y portugueses, y era bastante más numeroso de lo que se esperaba.

A las diez de la noche (hora portuguesa) comenzó la aventura, primero con una palabras del Presidente de la Câmara, que elogió las murallas que íbamos a visitar: “nós os políticos temos de falar das coisas boas que temos na nossa terra, e a Fortaleça de Valença é a nossa joia da coroa”. Es importante señalar que estas son las murallas más antiguas y mejor conservadas de Europa.

El paseo iba a ser amenizado con la guitarra e la voz del Sr. António Vilarinho, músico de la tierra, en las diferentes paradas explicativas, y la primera de las canciones que cantó la hizo como un guiño a los gallegos que allí estaban: “ondiñas veñen, ondiñas veñen, ondiñas veñen e van…” Y entonces, comenzó la historia bien narrada, la luz en pinceladas, las linternas de aceite y las modernas linternas que se cargan con una dinamo.

El edificio en el que se alberga el Núcleo Museológico todavía es conocido por muchos como la vieja cárcel, sin embargo antes de ello, también fue Morada de Reyes, en 1502 se alojó en ella el Rei Manuel I. En 1755, el terremoto, el gran terremoto, destruyó parte del edificio.

Esta visita nocturna fue la segunda, en la primera se recorrió la parte más antigua de las murallas de la Fortaleza, en esta ocasión se dio la vuelta a la Coroada, el lado más débil. Pero habrá una tercera vista, el último fin de semana de agosto, en la que se dará una vuelta completa a los 5 kilómetros de murallas.

La historia de la Fortaleza es más larga que su perímetro, su construcción demoró siglos en ser terminada, existen cinco murallas alrededor de ella. Los ataques y la amenaza constante de invasión por parte de los españoles del otro lado del río hicieron que esta fortaleza fuera un campo de experimentación del arte de la guerra, sobretodo de la defensa.

En Valença, donde hoy se ubica el edificio de las Finanzas, fue uno de los primeros lugares donde se impartieron clases de matemáticas aplicadas a la guerra.

Valença nunca fue conquistada, las piedras de la fortaleza, con sus recovecos, sus bocas de fuego, los revellines, los baluartes, sus poternas (puertas disimuladas), vieron muchos intentos de conquista a Portugal (conquistar Valença significaba entrar en Portugal) y una rendición. Valença se rindió ante los franceses en 1809, por la fiereza de éstos y la escasez de medios de los Valencianos. No consta que esta rendición dejase vidas por el camino, sin embargo, los franceses volaron las murallas por tres partes y saquearon iglesias y casas.

En esta ocasión, no se sabe quien capituló antes, si fueron las linternas o los visitantes poco importa y a todos se recompensó por igual con un Caldo Verde*.Las murallas sabemos que no se rindieron a los fogonazos de luz y las cámaras de fotos, porque allí seguirán cuidando la joya de la corona de Valença, su Fortaleza.

in Portugal ao Pé

1 comentário:

  1. Conheço a original do texto e a sua autora. que esteve hoje mesmo em minha casa - Campos _ VNC.

    Existe uma reportagem fotográfica fabulosa do evento feita pelo meu marido, José Ferreira, aqui - http://assime.wordpress.com/.

    Faremos novamente a próxima visita, sendo que esta será feita na integra e já sugerimos pelo menos dois guias, para que possamos inteirar-nos de tudo o que é dito.

    Obrigada

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