Las obras de protección de los pilares incluyen la colocación subterránea de una armadura envolvente de hormigón especial
El antiguo puente internacional sobre el río Miño que une las ciudades de Tui y Valença do Miño, construido hace 126 años, aumentará su resistencia para el aumento del peso del transporte de mercancías por ferrocarril. Es uno de los objetivos de las obras que están en ejecución y que incluyen la protección de los pilares, a diez metros de profundidad, mediante la colocación de una armadura envolvente de unos 30-40 centímetros de espesor y de 10 metros de alto (bajo el agua), hecha de hormigón C40/50. En estos momentos esta operación se realiza en el pilar P-5, situado en la parte española.
Cuerpo técnico de la Red de Ferrocarriles de Portugal, Refer, precisa que debajo de esa armadura de hormigón se colocan columnas de cemento rodeando el pilar.
Se han retirado las cuñas de pino verde con sílice que se utilizaron en la cimentación, en el momento de su construcción, hace 126 años, unas piezas que conservará la compañía. También se han eliminado las capas de hierro antiguo que cubrían el pilar según el sistema "havage". El hormigón C40/50 es su sustituto para esa protección y para impedir la infraexcavación por efectos del comportamiento del río Miño. Se trata de un cemento especial resistente al agua que controla la retracción, como se comprobó con estudios previos antes de ejecutar la obra.
"Se han hecho varios estudios antes de decidir su empleo", indican las mismas fuentes sobre el resultado del material que se está empleando. Se utilizarán cien metros cúbicos de hormigón por cada uno de los pilares.
En la actualidad se está trabajando a una cota máxima de profundidad de excavación de 10-12 metros, desde la lámina de agua. Un equipo de buzos ha prestado su apoyo en el montaje de la secadera que rodea el pilar y sobre cuyo fondo están trabajando los operarios.
La obra, cuya finalización se prevé en junio de 2013, tendrá una fase en la que se cortará el tráfico, tanto de vehículos como ferroviario y de peatones. Se realizará de madrugada para evitar al máximo las molestias que pueda causar a los usuarios. Consistirá en la elevación del tablero superior del puente, mediante "macacos" hidráulicos, para reponer los aparatos de apoyo que se sustituirán por unos nuevos, también de hierro, combinado con neopreno.
in faro de Vigo
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